El Casentino constituye uno de los pocos rincones sin explotar de la Toscana, la cual, siendo una de las zonas, en mi opinión, más bellas de Italia, está turísticamente aprovechada a su máximo exponente. Eso si, con mucho gusto y fomentando el turismo y la gastronomía rural, lo que elimina la sensación de encontrarte en una parque temático. Sin embargo, el Casentino, un poco alejado de la campiña sienense y del Chianti, es un reducto hermoso y encantador donde transcurre tranquilamente la vida (tal vez demasiado....) a espaldas de la "fiebre de la Toscana".
Esta zona pertenece a la provincia de Arezzo y abarca el territorio comprendido desde un pueblo llamado Subbiano hasta el confín con la región de Emilia-Romagna. La zona más típica va desde Bibbiena hasta Stia.
Uno de los grandes tesoros del Casentino es que en pocos minutos te encuentras en el Parque Nacional de "Le Foreste Casentinese". Se trata de un hermoso parque nacional compuesto por bosques de castaños, alcornoques, robles y miles de especies más. El paisaje, sobre todo en otoño, es espectacular. Merece la pena que más adelante le dedique una entrada personalizada!
Casentino es un lugar con identidad propia: su gente, sus tradiciones, su paisaje, su gastronomía y sus fiestas. Posee un pulso propio que a veces late con independencia del mundo exterior que le rodea. Y qué mejor oportunidad que seguir la historia de una española adaptándose a la vida allí para descubrir todos los secretos del lugar!

